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Cuando tu bebé se pone inquieto al tomar pecho, puede ser estresante para ambos. Este problema común puede deberse a diversos motivos, como el hambre, la incomodidad o incluso la necesidad de cambiar de posición para alimentarse. Comprender la causa principal de la inquietud de tu bebé es clave para encontrar una solución y garantizar una experiencia más fluida. En este artículo, analizaremos las posibles causas de que un bebé esté inquieto al tomar pecho y ofreceremos consejos prácticos para ayudar a calmar a tu bebé durante las sesiones de lactancia.
¿Por qué mi recién nacido llora mientras le doy de lactar?
Si tu bebé se queja durante la lactancia, quiere decir que algo no le gusta. Pero ¿por qué ocurre esto y qué puedes hacer?
Las siguientes son algunas razones del por qué el bebé está inquieto durante la lactancia.
- El bebé aún no tiene hambre. Puede que tu bebé esté inquieto porque no está listos para tomar pecho. Asimismo, puede que necesite eructar o que se le cambie el pañal antes de poder relajarse y alimentarse. Si tu bebé no quiere tomar pecho, haz una pausa y abraza a tu bebé. Cuando esté listo, empezará a buscar el pecho de nuevo.
- El bebé está lleno. A medida que el bebé crece, sus patrones de lactancia cambian. Es posible que ya no necesiten alimentarse con tanta frecuencia o durante tanto tiempo y que sólo quieran un pecho. Deja que tu bebé determine cuando ha tomado suficiente. Confía en que se alimentará cuando tenga hambre.
- Posición incorrecta. Un agarre débil puede ser realmente frustrante para tu bebé, ya que necesitan una buena posición para obtener suficiente leche. Para ello, puedes probar el agarre dirigido por el bebé. Deja que tu bebé ayude y encuentre una posición cómoda. Si los problemas continúan, busca ayuda de un asesor de lactancia.
- Problemas con el flujo de leche. Algunos bebés se ponen inquietos cuando el flujo es muy rápido o lento. Un flujo rápido hace que se ahoguen, mientras que un flujo lento les frustra. Si es demasiado rápido, intenta ponerte en posición vertical o extraer un poco de leche antes de dar pecho. Si el flujo es demasiado lento, las compresas suaves pueden ayudar.
- Alimentación con biberón y lactancia materna. Si usas biberones y lactancia, entonces tu bebé puede acostumbrarse al flujo más rápido del biberón y ponerse inquieto al tomar pecho. Asimismo, se puede reducir al máximo el uso del biberón o utilizar tetinas de flujo lento si es necesario combinar métodos de alimentación.
- Bebé dolorido o enfermo. El dolor provocado por la dentición, una enfermedad o las vacunas puede dificultar la lactancia del bebé. Consuela a tu bebé cuando esté enfermo. Los llantos debidos a molestias o enfermedades suelen desaparecer en cuanto empiezan a sentirse mejor. Si el problema persiste, consulta a un médico o un especialista en lactancia.
Que tu bebé esté inquieto al momento de tomar pecho es una forma de decir: "No estoy listo" o "Estoy lleno". Confía en las señales de tu bebé, ofrécele el pecho cuando creas que el bebé quiere lactar. Si tienes dudas, pregúntale a tu médico o asesor de lactancia.
¿Cómo tratar a un bebé que se pone inquieto al tomar pecho?
Es normal que los bebés se pongan de mal humor cuando toman pecho. Pero puede volverse muy irritante tanto para ti como tu bebé en algunas situaciones. Hay varias formas de tratar a un bebé inquieto y facilitar la lactancia para ti y tu bebé.
- Contacto piel con piel
Seguro que a ti y a tu bebé los tranquiliza el contacto piel con piel. Así, sostener a tu bebé junto al pecho antes de darle pecho suele estimular las acciones instintivas de lactancia, ayuda a regular la frecuencia cardiaca y respiratoria y ofrece una sensación de seguridad. Es un buen momento para calmar a un bebé inquieto antes de intentar darle de lactar.
- Cambia de lados o prueba diferentes posiciones
A veces, los bebés se quejan porque no están cómodos con su posición de lactancia actual. Prueba cambiando al otro pecho o con diferentes posiciones de lactancia para ver cuál prefiere tu bebé. Un cambio de posición puede ayudar a mejorar el agarre y hacer que la toma sea más cómoda para tu bebé. Usar una almohada de lactancia puede ayudar con esto también. La almohada de lactancia Momcozy proporciona un apoyo más completo de los brazos de la mamá. Esta almohada de lactancia también ayuda a permanecer en una posición ideal, eliminando el espacio entre la mamá y el bebé.
- Deja que otra persona calme al bebé
Incluso puede ser útil pasar el bebé a otro cuidador cuando te sientas abrumada o frustrada. A veces, los bebés pueden percibir cuando sus padres están estresados, lo que les dificulta la tarea. Un pequeño descanso puede darte una oportunidad para descansar, y tu bebé podría estar más dispuesto a mamar cuando haya tenido un poco de tiempo para calmarse.
- Prueba el movimiento y la oscuridad
Los bebés están acostumbrados al espacio tranquilo y cerrado del útero, y adaptarse al mundo luminoso y ruidoso puede resultar abrumador. Intenta imitar el ambiente del útero materno meciendo suavemente a tu bebé en brazos, usando un portabebés o colocándolo en un mecedor. Atenuar las luces o utilizar ruido blanco también puede crear una atmósfera tranquilizadora que ayude a tu bebé a mamar más fácilmente.
- Haz eructar a tu bebé
Si el bebé tiene gases o algo de aire atrapado en el estómago, puede resultar incómodo darle pecho. Por ello, hacer eructar al bebé antes o incluso durante la toma puede ayudar a aliviar las molestias. Mantén al bebé erguido contra tu pecho o dale suaves palmaditas para ayudarle a liberar los gases atrapados.
Dar de lactar cuando tu bebé se despierta de una siesta suele ser una experiencia más sencilla. Los bebés no suelen ser muy exigentes cuando están en este estado de sueño, y puede ser un buen momento para ofrecerles los pechos antes de que se despierten de verdad y se pongan muy activos.
- Sé paciente
La lactancia es una experiencia de aprendizaje tanto para ti como para tu bebé. Toma algo de tiempo tranquilizar al bebé, y la paciencia puede ayudar mucho. Si tu bebé sigue resistiéndose a tomar pecho, toma un descanso e inténtalo después. Confía en que tu bebé tomará pecho cuando esté listo.
Preguntas frecuentes sobre los bebés que se ponen inquietos y patalean mientras toman pecho
¿Cómo saber si un bebé está cómodo mientras toma pecho?
Para saber si el bebé está cómodo mientras toma pecho, busca las siguientes señales:
- Cuerpo relajado: Todo el cuerpo del bebé está relajado con las manos abiertas y una cara calmada.
- Ritmo de succión: El bebé succiona rítmicamente y toma la leche, lo que demuestra que se está alimentando correctamente.
- Agarre adecuado: El bebé se agarra al pecho sin causar dolor a la madre y más que pegado al pezón.
- Lactancia activa: El bebé succiona y toma, y no se aleja ni se queja mucho.
- Contento después de la toma: El bebé se ve relajado, puede dormirse o parecer satisfecho una vez hecho.
- Sin exigencias: El bebé no llora, no se arquea ni se aparta durante la lactancia.
¿Por qué mi bebé está llorando y arqueando su espalda mientras toma el pecho?
Un bebé que arquea su espalda y llora durante la lactancia puede ser normal e inofensivo, pero también puede indicar una sensación de molestia, dolor o una condición más seria:
- Incomodidad o dolor
El bebé arquea su espalda cuando está incómodo o le duele los gases, los cólicos o el reflujo. La mayoría de los bebés tienen reflujo, que se produce cuando el ácido del estómago sube a la garganta.
- Frustración o cansancio
Puede que los bebés arqueen sus espaldas si están frustrados o cansados. Por ejemplo, si quieren que baje la leche y tarda en bajar, o el flujo del biberón es fuerte, pueden arquear la espalda.
- Reflejo de moro
El reflejo de Moro es una reacción involuntaria que tienen los bebés cuando sienten una pérdida de apoyo o se sobresaltan por un ruido fuerte. Es un reflujo normal que muestra buen desarrollo neurológico.
- Kernicterus
Esta afección es el resultado de la acumulación de bilirrubina en la sangre del bebé, un compuesto amarillo que se forma cuando los glóbulos rojos se descomponen. Provoca rigidez de los músculos y reflejos anormales que pueden causar arqueamiento.
- Inmadurez neurológica
Los bebés con inmadurez neurológica u otros problemas pueden arquear la espalda como una de las características del aumento del tono muscular u otra afección neurológica.
¿Debería dar de lactar a mi recién nacido cada vez que llora?
No tienes que dar de lactar a tu bebé cada vez que llora. En primer lugar, los bebés lloran por diferentes razones y no necesariamente porque tienen hambre. Puede ser por pañales sucios, porque está demasiado cansado, incómodo, y mucho más. Así que, si tu bebé llora por esas razones, puede que la lactancia no lo resuelva. Asimismo, dar de lactar en exceso también causa malestar, así que intenta discernir cuál es realmente el problema. A veces, un chupón podría calmarlos cuando tienen hambre. De igual forma, confía en tus instintos mientras aprendes a reconocer qué significan los llantos de tu bebé.
Conclusión
Que un bebé esté inquieto mientras le dan pecho es algo común y puede deberse a varios factores, desde hambre hasta molestias o incluso problemas con la posición. La mayoría de las madres aprenden a adaptarse y cambiar sus técnicas de relajación en función de lo que consideran que les funciona mejor. Puedes intentar cambiar de postura, hacer eructar al bebé o incluso el contacto piel con piel para que se sienta relativamente más cómodo y pueda tomar pecho con éxito. Recuerda que la paciencia es lo mejor, ya que tanto tú como tu bebé aprenderán mientras se adaptan a la lactancia. Si las dificultades persisten, no dudes en pedir consejos a un especialista en lactancia o un pediatra para asegurarte de que tanto tú como tu bebé reciben apoyo en este proceso.
