La lactancia es un proceso natural, aunque a menudo misterioso, que comienza mucho antes de la llegada de tu bebé. Como futura madre, puede que te preguntes "¿Cuándo comenzaré a producir leche materna?" Conocer el proceso de la producción de leche puede ayudarte a aliviar tu ansiedad y prepararte para los siguientes pasos.
¿Cuándo comenzará la producción de leche materna?
¿En qué semana tu cuerpo comenzará a producir leche materna? La producción de leche materna comienza a las pocas semanas del segundo trimestre de tu embarazo. A medida que aumentan los niveles de estrógeno y progesterona, tu cuerpo empieza a prepararse para dar de lactar aumentando el número de conductos mamarios de los pechos, que se encargan de transportar la leche desde los alvéolos hasta los pezones.
Aunque la producción de la leche materna comienza durante el embarazo, no suele establecerse por completo hasta unos días o alrededor de 3 a 5 días después del parto, que es cuando la leche subirá.
A mediados del embarazo, tu cuerpo comenzará a producir calostro, un líquido espeso y amarillo lleno de nutrientes y anticuerpos. Esta leche especial es el primer alimento de tu bebé, le aporta nutrientes importantes y lo ayuda a protegerse de enfermedades justo después de nacer.
Esta producción temprana de calostro es una pieza clave del proceso natural de tu cuerpo, ya que se asegura de que estés preparada para alimentar a tu recién nacido en cuanto nazca.
Señales de que la leche materna está subiendo
Saber a qué señales debes estar atenta te puede ayudar a sentirte más tranquila durante este periodo. Por ello, te mostraremos las señales más comunes de que tu producción de leche materna está subiendo, para que puedas reconocer estos cambios y sentirte segura de que tu cuerpo está preparado para alimentar a tu bebé.
- Cambios en los pechos -Una señal de que hay leche materna es la sensación de que tus pechos están más llenos, firmes y pesados a medida que aumenta la cantidad de leche.
- Congestión mamaria -Algunas mujeres experimentan congestión mamaria como señal de producción de leche materna, en la que los pechos se hinchan, se calientan y se vuelven sensibles al tacto.
- Fugas -Es posible que notes pequeñas pérdidas de leche por tus pezones, sobre todo cuando el bebé llora o cuando se acerca la hora de comer.
- Conducta del bebé -Es posible que tu bebé empiece a comer con más frecuencia durante la lactancia, lo que indica que está saliendo más leche.
- Venas mamarias - Las venas visibles en los pechos pueden ser una señal de que tu cuerpo se está preparando para producir leche. Durante el embarazo y la lactancia, el aumento del flujo sanguíneo puede hacer que estas venas sean más prominentes, lo que indica que tu cuerpo se está preparando para producir leche de forma activa. Este es un cambio fisiológico normal, ya que tus pechos experimentan los ajustes necesarios para dar de lactar.
- Dolor en los pezones - En los primeros días de lactancia, es probable que te duelan los pezones o los sientas sensibles mientras se acostumbran a la succión de tu bebé. Si tus pezones están agrietados o te duelen, y el dolor no mejora al cabo de una o dos semanas, comunícate con un asesor de lactancia, un médico o una enfermera.
Las tres fases de la leche materna
Otra pregunta que se necesita responder es: ¿Cómo comenzar a producir leche materna? La leche materna tiene tres fases diferentes - el calostro, la leche de transición y la leche madura.
Fase |
Edad del bebé |
Cantidad promedio |
Características |
Calostro |
Mientras estás embarazada o justo después del parto |
5 a 20 mililitros |
Muy rica en nutrientes y tiene anticuerpos que protegen a tu bebé de las infecciones. |
Leche de transición |
De 2 a 5 días hasta 20 días después del parto |
16 a 20 onzas |
Un mayor contenido en grasas y calorías para satisfacer las necesidades crecientes de energía de tu bebé |
Leche materna madura |
De 10 a 15 días después del nacimiento |
25 a 35 onzas |
Una combinación equilibrada de proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales |
- El calostro es la primera leche que tu cuerpo produce después del parto, normalmente en los primeros días. Es espesa y amarilla y, aunque solo produzcas una pequeña cantidad, está llena de importantes nutrientes y sustancias inmunológicas que ayudan a proteger a tu recién nacido y favorecen su crecimiento temprano.
- La leche de transición es más ligera y fina que el calostro, y comenzarás a producir más de ella. Ayuda a tu bebé a prepararse para la leche madura sin dejar de aportarle los nutrientes que necesita.
- La leche materna madura es más ligera y aguada. Esta leche está bien equilibrada en proteínas, grasas y otros nutrientes que contribuyen al crecimiento y el desarrollo continuos de tu bebé. También sigue ofreciendo protección inmunológica, adaptándose a las necesidades cambiantes del bebé.
¿Por qué tu leche materna puede retrasarse?
El retraso de la leche materna se da cuando la producción de leche de la madre se toma más tiempo para subir después del parto. Normalmente, la producción de leche aumenta en el primer día de posparto, pero algunas madres pueden tardar más. Estas son algunas de las razones por las que esto puede ocurrir:
- Problemas durante el parto, como una Sección C, un parto prematuro, estrés posparto o el uso de medicamentos específicos, puede influir en el momento de la producción de leche. Por ejemplo, una cesárea o un parto prematuro pueden alterar las señales hormonales que desencadenan la producción de leche, mientras que los medicamentos pueden interferir en la capacidad del cuerpo para producir o liberar leche.
- Hemorragia posparto grave (hemorragia excesiva) después del parto puede provocar una disminución del flujo sanguíneo y de los niveles de energía, lo que puede afectar la capacidad del organismo para iniciar o mantener la producción de leche.
- Restos de placenta retenidos, cuando quedan restos de la placenta en el cuerpo de la madre después del parto, estos pueden interferir en los cambios hormonales normales y necesarios para la producción de leche, retrasando potencialmente la subida de la leche.
- Enfermedades de la tiroides, el ovario poliquístico, la diabetes y la obesidad. Estas afecciones médicas pueden alterar el equilibrio hormonal y los procesos metabólicos, que son fundamentales para la producción de leche. Por ejemplo, las enfermedades de la tiroides pueden afectar los niveles hormonales, mientras que la diabetes y la obesidad pueden afectar la salud general y la producción de leche.
- Cirugías mamarias previas que afectan los nervios, la producción, el tejido o los conductos por donde pasa la leche, pueden afectar la producción de leche. Estas cirugías podrían dañar los tejidos o nervios implicados en la producción y liberación de leche.
- Algunas mujeres pueden tener tejido glandular insuficiente, que es esencial para producir leche. Esta afección puede limitar la cantidad de leche producida, lo que provoca retrasos al inicio de la producción de la leche.
¿Qué hacer si tu leche se retrasa?
Después del parto, hay muchísimos métodos eficaces para estimular la producción de la leche materna:
- Lactancia materna frecuente- Dar de lactar con frecuencia suele ser una señal para que tu cuerpo produzca leche, lo que ayuda a establecer y mantener una producción de leche constante. Mientras más des de lactar a tu bebé, más leche producirá tu cuerpo para satisfacer sus necesidades.
- Extracción de leche - Usa un sacaleches para extraer leche entre tus sesiones de lactancia. Esta extracción de leche puede estimular a tu cuerpo a producirla debido a que vacías tus pechos, lo que indicará a tu cuerpo que debe volver a llenarlos, especialmente si tu bebé no puede lactar bien o si necesitas aumentar tu producción de leche. Usa Momcozy M9, que es un sacaleches eléctrico, portátil y de manos libres. Además, dispone de un motor robusto capaz de proporcionar una succión potente de hasta -300 mmHg.
El sacaleches ofrece una variedad de modos a los que puedes acceder desde la app Momcozy o directamente desde tu dispositivo. Tiene tres modos de extracción: Modo de estimulación, modo de extracción y modo mixto. Estos modos e intensidades garantizan flexibilidad y eficacia, adaptándose a las diferentes etapas de lactancia y a las preferencias individuales.
- Contacto piel con piel- El contacto piel con piel con tu bebé ayuda a liberar hormonas como la oxitocina, que son esenciales para la producción de leche. Esta estrecha conexión también puede hacer que tu bebé quiera lactar más, lo que aumenta aún más tu producción.
- Hidratación y nutrición- Mantenerte bien hidratada y comer una dieta balanceada rica en nutrientes es esencial para mantener una producción de leche sana. La hidratación y la alimentación adecuada son clave para mantener una producción de leche sana, ya que tu cuerpo necesita suficientes líquidos y energía para producir leche.
- Descansa y controla el estrés- Dormir lo suficiente y reducir los niveles de estrés pueden ayudar a mantener tu producción de leche. El estrés y el cansancio puede disminuir la cantidad de leche que produces, así que es importante que te cuides.
- Masajes en los pechos- Masajear suavemente tus pechos antes y durante la lactancia o la extracción puede ayudar a que la leche fluya y evitar cualquier obstrucción. Esto puede facilitar la lactancia de tu bebé y garantizar que tus pechos se vacíen correctamente, lo que fomenta una mayor producción de leche.
Conclusión
Por ello, las madres primerizas se preguntan "¿Cuándo comenzaré a producir leche materna?". Como futura madre, quieres darle a tu bebé todos los nutrientes que puedas. Y como es natural, te estresarás si tu producción se retrasa, pero siempre hay solución. No te rindas y busca ayuda de profesionales después de haber intentado todo.