La primera vez que sostienes a tu bebé es un momento realmente mágico, pero también aterrador. Uno de los más grandes miedos de toda mamá es sostener el cuello de su bebé. Esto se debe a que, durante las primeras semanas y meses de vida, el bebé tiene los músculos del cuello muy débiles como para mantener su cabeza erguida. Si tu bebé lo intentara, su cabecita se movería de atrás hacia adelante, lo que le resultaría incómodo o incluso doloroso.
¿Cuándo comienzan los bebés a mantener su cabeza erguida?
Cada bebé crece a su propio ritmo. Sin embargo, la mayoría de los bebés recién nacidos comienza a tener algo de control del cuello entre el primer y tercer mes de vida. Al final del primer mes, los bebés ya tienen la capacidad de sostener su cabeza y cuello sin la ayuda de mamá. Cuando llegan al mes y medio, muchos de ellos ya pueden levantar levemente su cabeza cuando están recostados boca arriba.
Al llegar a los 3 o 4 meses, ya son capaces de mantener la cabeza firme cuando los sostienen en una posición vertical o cuando están recostados boca arriba. Cuando llegan a los 5 o 6 meses, ya deberían tener el control completo del cuello, por lo que pueden sentarse sin balancear (mucho) la cabeza.
Ten en cuenta que estos indicadores de desarrollo son referenciales. Los bebés prematuros o con alguna condición médica pueden demorar un poco más en desarrollar estas habilidades.
¿Cómo se desarrolla el control del cuello en bebés?
Para que tu bebé pueda tener el control de esta zona, debes hacer que fortalezca los músculos del cuello, espalda alta y hombros. Para lograrlo puedes:
- Incentivar el tiempo boca abajo
Una de las mejores formas de garantizar que tu bebé tengo fuerza en el cuello es recostándolo boca abajo. Cuando recuestas a tu bebé despierto de esta manera y lo acompañas, lo incentivas a mover su cabeza para que mire a su alrededor. Así, los músculos del cuello que le permiten levantar la cabeza se fortalecen.
- Cargarlo y sostenerlo contra tu pecho
Cuando sostienes a tu bebé erguido contra tu pecho, lo ayudas a desarrollar su habilidad para mantener la cabeza en esa posición, especialmente cuando ya está más fuerte y grandecito.
- Promover los movimientos repetitivos
Cuando tu bebé se mueve, patea o cambia de posición, está ejercitando varios grupos de músculos, lo que puede ayudarle a mejorar el control de la cabeza y el cuello.
- Hacer actividades interactivas
Incluso cosas simples como hacer que tu bebé se siente (hasta lograr que mantenga la cabeza erguida), que siga un objeto con la mirada o hacer que vea su reflejo en un espejo, puede hacer que desarrolle la coordinación entre distintos músculos.
Lo más importante es ser paciente y constante. Recostarlo boca abajo por unos minutos o sostenerlo con la cabeza erguida varias veces al día puede ser muy importante para su desarrollo en los primeros meses.
¿Cómo sostengo la cabeza y cuello de mi bebé de forma segura?
Un recién nacido no tiene mucho control de su cuello y cabeza, por lo que siempre es mejor sostener su cuello cuando:
- Lo alzas.
- Lo cargas.
- Lo alimentas.
- Lo recuestas boca arriba.
Algunas formas de sostenerlo son:
- Con el soporte de las manos
Sostén la cabecita de tu bebé por la parte posterior con una mano y la parte inferior de su cuerpo con la otra mano. Así, tendrás una mejor sujeción del cuello cuando lo alces o sostengas.
- En posición de cuna
Sostén a tu bebé entre tus brazos de manera que su cabecita esté entre tu codo y antebrazo. Así, estarás dándole buen soporte a su cuello.
- Con la cabeza erguida
Cuando sostienes a tu bebé erguido contra tu pecho, pon una mano entre su cuello y espalda alta para darle soporte a su cabecita.
- Con la ayuda de productos especializados
Hay algunos productos que están diseñados especialmente para promover la sujeción del cuello del recién nacido de forma segura. La mochila portabebés para recién nacidos WeeSnug Momcozy es uno de los productos más recomendados del mercado.
Facilidad de uso
Durabilidad del material
Funcionalidad
Facilidad de uso
Durabilidad del material
Funcionalidad
¿Qué hace que la mochila portabebés para recién nacidos WeeSnug Momcozy sea una solución perfecta?
- Soporte ergonómico del cuello: : Gracias a su diseño, puedes sostener la cabeza y el cuello de tu bebé sin tener que usar tus manos todo el tiempo. Además, hace que tu bebé se mantenga en la misma posición todo el tiempo.
- Protección contra el sol: Tiene un parasol incorporado que no solo protege la piel delicada de tu bebé, sino que también brinda cobertura adicional en la zona del cuello y la cabeza.
- Ajuste perfecto: Su diseño hace que la mochila pueda adaptarse al tamaño de tu bebé, que está en constante cambio, dándole soporte a su cuello en sus primeros meses de nacido.
- Diseño manos libres: Te sentirás cómoda y podrás moverte como quieras mientras mantienes a tu bebé cerca de ti y en una posición apropiada.
Cuando tienes una mochila portabebés para recién nacidos de excelente calidad, como la mochila portabebés WeeSnug Momcozy, puedes tener a tu bebé cerca de ti sin preocuparte por lesionar su cuello, incluso cuando estás haciendo muchas cosas a la vez.
¿Qué sucede si no sostengo bien el cuello de mi recién nacido?
Los músculos del cuello de un bebé son muy frágiles cuando nace. No puede controlar el movimiento de su cabeza de forma equilibrada como los bebés más grandes o los adultos. Una mala técnica a la hora de sostener su cuello y cabeza puede ocasionar desde incomodidad hasta problemas graves de salud.
- Tensión en el cuello o lesiones
Si no hay una buena sujeción del cuello, la cabeza de tu bebé puede moverse de adelante hacia atrás de forma inestable. Este movimiento agresivo puede sobrecargar los pequeños músculos del cuello, así como los tendones y ligamentos, lo que puede provocar un esguince leve o incluso un daño más serio en los tejidos blandos. En algunos casos, un soporte inadecuado constante puede incluso generar un traumatismo más grave, especialmente si el bebé tuvo caídas o movimientos bruscos accidentalmente.
- Asfixia postural (que pone en riesgo la respiración)
La asfixia postural es una de las condiciones más peligrosas que pone en riesgo la vida del bebé. Sucede cuando el cuello de tu bebé se queda inclinado hacia adelante, bloqueando las vías respiratorias. Puede ocurrir si está sentado, ya sea en un asiento de carro, columpio o mochila portabebés, sin el soporte adecuado para su cuello y cabeza. Al bloquear las vías respiratorias, tu bebé no puede respirar con normalidad. La falta de oxígeno puede ser perjudicial para él y, en el peor de los casos, puede comprometer su vida si no se trata al instante.
- Irritabilidad y ausencia de comodidad
Una sujeción del cuello inapropiada, aunque sea leve, puede hacer que tu bebé se sienta incómodo e inseguro. Por naturaleza, el recién nacido busca la estabilidad y soporte que tenía dentro del vientre. Cuando su cabeza no tiene el soporte apropiado, puede sentirse irritado, llorar o patalear cuando lo sostienes. A largo plazo, el malestar ocasionado puede perjudicar su vínculo afectivo, rutina de alimentación o de siesta.
- Problemas para alimentarlo
Una mala alineación del cuello puede traer dificultades a la hora de alimentar a tu bebé. Si su cabeza no tiene soporte, habrá problemas para alimentarlo o para que tenga un buen agarre. Además, puede aumentar el riesgo de que se atragante o tenga arcadas durante las tomas. Una posición estable de la cabeza y el cuello te permitirá alimentar de forma apropiada y segura a tu bebé.
- Problemas de digestión y reflujo
Cuando no sostienes correctamente a tu bebé a la hora de alimentarlo o después de hacerlo, aumentan las probabilidades de que tengo reflujo. Al sujetar su cabeza en una posición inestable, la presión abdominal puede aumentar, lo que causa que vomite o se muestre irritado debido al reflujo.
- Probabilidad de desarrollar problemas a largo plazo
Un soporte inadecuado del cuello durante mucho tiempo puede causar desbalances musculares o retrasar el desarrollo motor. Los bebés necesitan una base sólida para aprender patrones de movimiento importantes, como rodar, sentarse o gatear. Estos indicadores de desarrollo pueden verse afectados si el cuello se esfuerza de más o si el bebé no puede controlar bien la cabeza.
En otros casos, la falta de soporte también puede derivar en condiciones como:
- Torticolis (cuello rígido)
- Plagiocefalia (aplanamiento de la cabeza debido a malas posiciones)
- Desarrollo tardío de habilidades motoras gruesas
¿Cuándo puedo dejar de sujetar la cabeza de mi bebé?
Aunque cada bebé se desarrolla a su propio ritmo, la mayoría logra un buen control de la cabeza entre los 4 y 6 meses de edad. Para ese momento, los músculos del cuello suelen ser lo suficientemente fuertes como para sostener la cabeza erguida cuando:
- Está recostado boca abajo.
- Lo cargas en posición vertical.
- Intentas hacer que se siente.
- Lo colocas en un asiento por un periodo corto de tiempo.
¿En qué casos mi bebé requiere que todavía sujete su cabeza?
Incluso si tu bebé ya ha desarrollado el control del cuello, todavía hay momentos en los que debes sostener su cabeza. Por ejemplo, cuando:
- Lo alzas o recuestas: Estos cambios de posición aún pueden generar movimientos bruscos que pueden llegar a sobreesforzar los músculos del cuello, aun cuando ya están bien desarrollados.
- Haces movimientos bruscos: Haces movimientos bruscos: Sostenerlo mientras caminas por superficies accidentadas, subes escaleras o te mueves de forma brusca, puede hacer que la cabeza de tu bebé se mueva cuando no debería.
- Usas mochilas portabebés o cochecitos: Los accesorios que usas para transportar a tu bebé deben tener un soporte para su cabeza, especialmente cuando va a tomar una siesta o lo vas a llevar en un paseo prolongado.
- Tu bebé está cansado o enfermo: El cansancio o la enfermedad pueden hacer que tu bebé tengo menos control de los músculos de su cuello y cabeza, por lo que necesita un soporte adicional.
¿Cuándo me debo preocupar si mi bebé no alza la cabeza?
Aunque es completamente normal que haya algunas variaciones en el desarrollo del control de la cabeza, hay ciertas señales que pueden indicar que tu bebé necesita la evaluación de un médico.
- Si, a los 2 meses, no demuestra esfuerzo para alzar la cabeza cuando lo recuestas boca arriba.
- Si, a los 4 meses, no puede mantener la cabeza firme o la tambalea constantemente cuando lo sostienes en posición vertical.
- Si deja caer su cabeza hacia atrás de forma constante cuando haces que se siente.
- Si tiene un tono muscular inusual, como un cuello demasiado rígido (hipertonía) o demasiado blando (hipotenía).
Conclusión
La sujeción del cuello es uno de los aspectos más importantes (y estresantes a veces) que te deberían preocupar. Cada bebé es diferente, por lo que lo que debes prestar atención a las señales que presenta tu bebé y contactar a su pediatra para absolver dudas. Con los cuidados adecuados desde su nacimiento, tu bebé podrá sostener la cabecita sin dificultades a medida que crece. Este momento te emocionará ya que se trata de un indicador de desarrollo que demuestra su crecimiento. Mientras lo acompañas en cada etapa, no olvides pensar en aquellos productos que facilitarán tu rutina, como el aspirador nasal para bebés Momcozy, que ayuda a tu pequeño a respirar cómodamente en cada fase de su crecimiento.