Cómo sostener a un recién nacido de forma segura y cómoda

No hay nada tan tierno como acurrucar a tu recién nacido, pero su tamaño tan pequeñito puede resultar un poco intimidante. ¿Cómo sostener esa cabecita inestable? ¿Dónde pones las manos? En realidad no es tan complicado como parece. Con unas técnicas sencillas podrás cargar a tu bebé de forma segura y con confianza, para que solo te dediques a relajarte y disfrutar esos primeros abrazos con tu recién nacido.

Cómo coger a un bebé recién nacido

Puede ser abrumador cargar a un bebé por primera vez, pero con estos sencillos consejos te sentirás mucho más tranquila. Aquí tienes instrucciones paso a paso para sostener a un recién nacido en una posición cómoda y segura tanto para ti como para tu bebé.

1. Lávate las manos

Empieza siempre con las manos limpias para mantener a tu bebé protegido de los gérmenes.

2. Sostén la cabeza y el cuello

Los músculos del cuello de un recién nacido aún no son lo suficientemente fuertes para sostener su cabeza. Desliza con cuidado una mano debajo de la cabeza y el cuello de tu bebé. Tus dedos deben sostener la base de su cráneo y tu palma debe apoyar su cuello.

3. Sostén la parte inferior

Coloca tu otra mano debajo del trasero y la parte baja de la espalda de tu bebé.

4. Levántalo con suavidad

Alza a tu bebé lentamente y con delicadeza. Evita movimientos bruscos.

5. Acuna al bebé

Una vez que tu bebé esté en tus brazos, sigue sosteniendo la cabeza y el cuello. Acércalo a tu pecho, con su cabecita apoyada en el pliegue de tu codo.

6. Ajusta la posición para mayor comodidad

Asegúrate de que el cuerpo de tu bebé no esté girado, sino bien alineado. Su carita debe quedar visible y libre de cualquier tela o de tu brazo.

Consejo: si puedes, usa una manta suave para darle más comodidad, pero nunca cubras la cara de tu bebé.

Posiciones comunes para cargar a un bebé

Existen varias formas seguras y cómodas de cargar a un bebé. Cada posición tiene beneficios tanto para ti como para tu pequeño.

La posición de cuna

Esta es una forma clásica y reconfortante de cargar a un recién nacido. Apoya la cabecita de tu bebé en el pliegue de tu brazo, con su espalda descansando sobre el mismo antebrazo. Con la otra mano, puedes sujetarle el trasero y las piernas. Esta posición es ideal para acurrucarlo, alimentarlo y mecerlo, por lo que es una de las más usadas cuando aprendemos cómo coger a un bebé recién nacido con suavidad.

La posición sobre el hombro

Es una posición muy común para hacerlo eructar. Coloca a tu bebé recto contra tu pecho, con su cabecita sobre tu hombro. Usa una mano para sostener su cabeza y cuello, y la otra para sostener su trasero. Las palmaditas suaves en la espalda en esta posición pueden ayudar a liberar el aire atrapado.

La posición de fútbol americano (o rugby)

Esta posición es adecuada para amamantar y puede resultar muy cómoda, incluso después de una cesárea. Coloca al bebé a lo largo de tu antebrazo, con sus piernitas metidas bajo tu axila. Su cuerpo debe descansar sobre tu brazo mientras su cabeza y cuello quedan bien sostenidos por tu mano.

Posición boca abajo (o para cólicos)

Es una posición reconfortante para algunos bebés, especialmente cuando tienen gases. Coloca a tu bebé boca abajo sobre tu antebrazo, con tu mano sosteniendo su cabeza y cuello y su abdomen apoyado en tu brazo. Asegúrate de que su boca y nariz queden libres.

Posición sobre el regazo

Siéntate y coloca al bebé sobre tu regazo, con su cabecita apoyada en tus manos. Es una excelente posición para mantener contacto cara a cara y para un tiempo boca abajo suave.

Posición en vertical

Sostén al bebé erguido contra tu pecho, con una mano sujetando su cabeza y cuello y la otra bajo su trasero. Esta posición se usa a menudo para reconfortarlo y para hacerlo eructar.

¿Qué posición prefieren los bebés?

Aunque cada bebé es diferente, a la mayoría les gusta que los carguen cerca del pecho. Esto les da calor y les permite escuchar los latidos de tu corazón, algo que les recuerda al útero. Pueden oírte y sentirte, lo que les transmite tranquilidad. Las posiciones verticales, como sostenerlos sobre el hombro, también suelen ser de sus favoritas porque les permiten mirar alrededor e interactuar con el entorno cuando están despiertos y atentos.

Prestar atención a las señales de tu bebé te ayudará a descubrir en qué posiciones se siente más cómodo y seguro. Si se inquieta en una posición, prueba otra hasta encontrar la que mejor funcione.

Las transiciones entre una posición y otra deben ser suaves. Nunca sueltes el soporte de su cabeza y cuello al cambiar de posición. Muévete despacio y con cuidado para no asustarlo.

Consejos prácticos para cargar a un recién nacido

Cargar a un recién nacido se vuelve más fácil con la práctica. Ten en cuenta estos consejos para asegurarte de que tanto tú como tu bebé estén seguros y cómodos.

• Considera usar un fular o portabebés. Cuando ya te sientas más segura sobre cómo coger a un bebé, un portabebés puede ser una excelente manera de mantener a tu pequeño cerca mientras tienes las manos libres. El portabebés para recién nacidos Momcozy WeeSnug está diseñado para brindar seguridad y comodidad, y ofrece un gran soporte para la cabeza y las caderas de tu pequeño. Su estructura ergonómica distribuye el peso de manera uniforme, lo que resulta suave para tus hombros y espalda y mantiene a tu recién nacido cómodo y bien sujeto. Sigue siempre las instrucciones para asegurarte de que tu bebé esté colocado de forma segura.

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• Sostén siempre la cabeza y el cuello. Esta es la regla número uno. Los músculos del cuello de un recién nacido aún son débiles, por lo que su cabeza inestable necesita tu apoyo en todo momento. Mantén siempre tu brazo o mano sosteniéndolos.
• Mantenlo pegado a ti y cómodo. Cargar a tu bebé cerca de tu cuerpo le da una sensación de seguridad y calor. Además, te ayuda a sostener mejor su peso y a notar sus señales más sutiles.
• Relaja tu cuerpo. Los bebés perciben la tensión. Respira profundo y relaja los hombros. Si estás tensa, intenta usar una almohada para apoyar mejor tus brazos mientras lo sostienes.
• Muévete con suavidad y delicadeza. Evita movimientos bruscos o repentinos. Los movimientos lentos y delicados no sobresaltan a tu bebé y lo mantienen tranquilo.
• Siéntate para tener más estabilidad. Especialmente en los primeros días, sentarte en una silla cómoda mientras cargas a tu bebé es una gran idea. Te da más estabilidad y reduce el esfuerzo en tu espalda y brazos, algo importante cuando estás aprendiendo cómo coger a un bebé sin cansarte demasiado.
• Presta atención a las señales con las que te indica que está incómodo. Observa cómo reacciona tu bebé. Si empieza a inquietarse, arquear la espalda o ponerse tenso, puede que no esté cómodo. Intenta cambiarlo cuidadosamente a otra posición.
• Está bien tomarte un descanso. ¡Tus brazos se cansarán! No dudes en pedir ayuda o en colocar al bebé de forma segura en su moisés o cuna por unos minutos. Cuidarte a ti misma también es importante.

Cuánto tiempo debes mantener al bebé en posición vertical después de comer

Muchas madres se preguntan cómo coger a un bebé recién nacido después de que ha comido. Mantenerlo en posición vertical después de alimentarlo ayuda a prevenir las regurgitaciones y reduce el riesgo de reflujo. La mayoría de pediatras recomienda mantener a tu bebé erguido durante al menos 15 a 30 minutos después de cada toma. Durante este tiempo, dale suaves palmaditas o frota su espalda para ayudarlo a eructar. Si tu bebé se queda dormido mientras lo mantienes erguido, puedes recostarlo con suavidad una vez que haya pasado el tiempo recomendado.

¿Qué hacer si tu bebé sigue llorando aun cuando lo sostienes?

Es normal que los recién nacidos lloren, incluso cuando los estás sosteniendo correctamente. Si tu bebé no deja de llorar, considera estas posibilidades:

• Hambre. Incluso si comió hace poco, puede que aún tenga hambre. Las tomas frecuentes son muy comunes en los recién nacidos.
• Gases o malestar. Intenta hacerlo eructar sosteniéndolo boca abajo sobre tu hombro o frótale suavemente la espalda o la barriguita. La posición boca abajo en tu antebrazo también puede darle alivio.
• Cansancio. Los bebés sobreestimulados pueden tener dificultad para calmarse. Prueba sostenerlo en una habitación tranquila y con poca luz.
• Temperatura. Revisa si tiene demasiado calor o demasiado frío. Sus manos y pies no son el mejor indicador, así que siente la nuca o la barriguita.
• Necesidad de cambio de pañal. Un pañal mojado o sucio puede causar incomodidad.
• Sobreestimulación. Demasiado ruido, luz o actividad puede abrumar a un recién nacido.
• Necesidad de consuelo. A veces, los bebés solo necesitan que los sostengan y los tranquilicen. Prueba con un suave balanceo o sonidos calmantes.
• Enfermedad. Si el llanto de tu bebé parece inusual o viene acompañado de otros síntomas como fiebre, letargo o cambios en su alimentación, es importante contactar al pediatra.

También es importante recordar que, a veces, los bebés lloran por razones que no podemos identificar de inmediato, y está bien. Eso no significa que estés haciendo algo mal. Si te sientes abrumada o frustrada, prueba lo siguiente:

• Está bien colocar a tu bebé suavemente en un lugar seguro y tranquilo, como su cuna. Baja la intensidad de la luz y reduce el ruido para ayudarlo a calmarse.
• Prueba otra posición. Es posible que tu bebé se sienta incómodo y prefiera que lo sostengas de otra manera. Esto puede ayudarte a descubrir cómo coger a un bebé de la manera que más lo calma.
• Mécelo suavemente o balancéalo. El movimiento puede ser muy reconfortante para los recién nacidos.
• Ofrécele un chupón. Succionar puede ayudar a calmar a algunos bebés.

Encontrando tu confianza al sostener a un recién nacido

No te preocupes si al principio te sientes un poco torpe al cargar a tu recién nacido—le pasa a todo el mundo. Muy pronto, ya no tendrás que pensar en cómo sostener esa cabecita inestable; será algo natural. Descubrirás rápidamente las posiciones que más calman a tu bebé y encontrarás un ritmo cómodo que funcione para ambos.