Incluso una congestión nasal leve puede preocupar mucho a cualquier padre cuando su bebé se resfría por primera vez. De inmediato surge la duda: ¿pueden los bebés morir por una nariz tapada? Los recién nacidos respiran casi exclusivamente por la nariz durante sus primeros meses de vida, así que cualquier obstrucción puede inquietar bastante.
Razones por las que los bebés se congestionan
La congestión nasal es muy habitual en los bebés y, aunque casi nunca es grave, sí conviene entender por qué ocurre. En la mayoría de casos puede manejarse en casa sin necesidad de acudir al pediatra, pero los pequeños muestran síntomas muy evidentes incluso con una congestión mínima.
Estas son las causas más comunes y reconocidas médicamente por las que un bebé puede presentar nariz tapada:
Resfriados e infecciones virales
Los resfriados son una de las causas más frecuentes de la congestión nasal en bebés. Durante el primer año pueden tener entre 8 y 10 resfriados porque su sistema inmunitario aún está inmaduro y no ha desarrollado defensas frente a los virus más comunes.
Cuando hay una infección viral de las vías respiratorias superiores, el revestimiento de la nariz se inflama y pueden aparecer:
- Goteo nasal
- Congestión
- Estornudos
- Tos suave o irritabilidad
Aire seco
El aire seco dentro de casa, sobre todo en invierno o con calefacción central, puede irritar y resecar las fosas nasales de tu bebé. Esto hace que la mucosidad se vuelva más espesa y dificulte que respire con comodidad. Algunos padres describen la situación así: "Durante el invierno, mi bebé tiene la nariz tapada y no puede respirar, y debo usar humidificador constantemente".
Los síntomas pueden incluir:
- Mucosidad espesa o con costras
- Soniditos de congestión, sobre todo por la noche
- Pequeños sangrados nasales por la sequedad de las membranas
Alergias y factores ambientales irritantes
Aunque es poco común que los bebés desarrollen alergias estacionales durante el primer año, sí pueden reaccionar a irritantes del entorno y a alergenos presentes en casa, como:
Ácaros del polvo
- Caspa de mascotas
- Humo de cigarrillo
- Perfumes o productos de limpieza con químicos
Congestión nasal fisiológica, también conocida como congestión normal del recién nacido
Muchos bebés parecen estar congestionados sin estar enfermos. A esto le llamamos congestión nasal fisiológica, y suele deberse a una o varias de las siguientes razones:
- Restos de líquido del nacimiento
- Adaptación a la vida fuera del útero
Este tipo de congestión suele:
- Ser más notoria durante las primeras 2–3 semanas
- Provocar ruiditos al respirar, sobre todo al comer o al acostarse
- Desaparecer por sí sola dentro del primer mes
Regurgitación o reflujo
Los bebés que regurgitan con frecuencia —ya sea por reflujo gastroesofágico (RGE) o simplemente por haber comido de más— pueden presentar goteo retronasal o irritación en la nariz. Esto ocurre porque la leche o el ácido que sube desde el estómago puede irritar las vías que conectan la garganta con la nariz.
- Señales que pueden indicar que el reflujo es la causa:
- Congestión nasal después de las tomas
- Regurgitaciones frecuentes
- Incomodidad al estar acostado boca arriba
Cómo descongestionar la nariz de un bebé de forma natural
Los bebés no saben sonarse la nariz, así que hasta una ligera congestión puede ponerlos incómodos, inquietos y dificultarles mucho el momento de comer o dormir. Las técnicas que te presentamos a continuación deben ser delicadas, ya que se aplican en recién nacidos, pero lo suficientemente efectivas como para darle alivio real.
1. Gotas o spray nasal salino
La solución salina (una mezcla básica de sal y agua estéril) ayuda a aflojar la mucosidad y a hidratar las fositas nasales secas o irritadas.
Uso:
- Acuesta a tu bebé boca arriba y baja ligeramente su cabecita. Coloca una o dos gotas (o pulverizaciones) en cada fosa nasal con un gotero o un atomizador. Espera 30 segundos para aflojar la mucosidad antes de aspirarla.
Después de aflojar la mucosidad con solución salina, puedes retirarla fácilmente con un aspirador, lo que despeja las vías respiratorias y permite que tu bebé respire, coma y duerma mejor. Algunos padres comparten: "Cuando mi bebé tiene la nariz tapada y no puede respirar, el aspirador nasal eléctrico hace toda la diferencia".
- Existen dos tipos de aspiradores: los manuales (tipo pera o de succión accionada por el adulto) y los eléctricos.
Productos destacados:
Aspirador nasal eléctrico 2 en 1 de Momcozy con spray y succión
Este aspirador multifuncional es práctico y muy completo, ya que combina succión automática y nebulización de solución salina, facilitando la limpieza de tu bebé. También resulta ideal para padres que necesitan un alivio rápido sin tener que usar varios dispositivos.
Diseño 2 en 1
Succión de 65 kPa
4 niveles de succión
Pulverización en niebla
Succión potente
9 niveles de succión
3 estilos de puntas
Fácil de limpiar
Por qué les encanta a los padres:
- Tres niveles de succión ajustables y funcionamiento con un solo botón
- Puntas de silicona ultrasuaves que no irritan la nariz del bebé
- Recargable y portátil: perfecto para usar en casa o fuera de ella
- Ideal para: bebés con congestión persistente o difícil de aliviar, especialmente en temporada de resfríos o alergias.
Aspirador nasal de grado hospitalario Momcozy
Este aspirador ofrece una succión potente cuando se necesita, con seguridad de nivel médico. Está diseñado para ofrecer un rendimiento similar al de un hospital, pero lo suficientemente suave para usar con bebés. Incluye varias puntas, succión ajustable y funcionamiento silencioso que no asusta al bebé.
Diseño 2 en 1
Succión de 65 kPa
4 niveles de succión
Pulverización en niebla
Succión potente
9 niveles de succión
3 estilos de puntas
Fácil de limpiar
Por qué destaca:
- Succión potente y segura con rendimiento de grado hospitalario
- Depósito incorporado para desechar de manera higiénica los fluidos con moco
- Recargable por USB y liviano
- Ideal para: padres de recién nacidos o lactantes que suelen resfriarse, congestionarse o tener congestión nasal por reflujo.
3. Usar un humidificador de vapor frío
Estar en un ambiente húmedo ayuda a aflojar la mucosidad y a aliviar la irritación de la nariz cuando hay inflamación causada por calefacción o aire seco.
Beneficios:
- Relaja la mucosa nasal irritada
- Evita la sequedad durante la noche
- Facilita un sueño reparador
4. Mantener bien hidratado al bebé
Los líquidos ayudan a diluir la mucosidad, facilitando su drenaje. Ya sea con lactancia materna o con biberón, asegúrate de que el bebé esté bien hidratado, especialmente cuando esté congestionado.
5. Terapia de vapor
El aire húmedo y caliente puede aliviar las vías nasales. Diez a quince minutos antes de dormir o de las siestas, siéntate con el bebé en un baño con vapor (sin estar en el agua caliente). Es una técnica muy efectiva antes de usar la succión.
¿Es seguro que un bebé duerma con la nariz tapada?
Sí, un bebé puede dormir con la nariz tapada, generalmente es inofensivo, sobre todo si la congestión es leve. Sin embargo, como los bebés respiran de manera distinta y sus vías respiratorias tienen una estructura particular, una ligera congestión puede resultar incómoda o alterar su sueño. Conocer la diferencia entre una congestión leve y algo serio ayuda a los padres a tomar precauciones adecuadas sin preocuparse innecesariamente.
¿Está bien que los bebés duerman con la cabeza elevada para respirar mejor?
No, aunque algunas personas consideran útil elevar al bebé, no se recomienda durante el sueño.
De hecho, un ejemplo frecuente que los pediatras reciben es cuando una madre comenta: "mi bebé está congestionado y no puede dormir, así que le pongo una almohada para levantar su cabecita". Sin embargo, esta acción es peligrosa. La Academia Americana de Pediatría (AAP) desaconseja claramente el uso de cunas inclinadas, cuñas y almohadas porque aumentan el riesgo de asfixia y síndrome de muerte súbita del lactante. La revisión de Consumer Reports de 2020 atribuyó decenas de muertes infantiles a cunas inclinadas.
Alternativa segura: para ayudar a despejar la mucosidad, mantén al bebé erguido mientras está despierto o antes de una siesta, pero en la cuna colócalo siempre boca arriba.
¿Pueden los bebés asfixiarse por la congestión?
Son muy pocos los casos en los que un bebé podría morir por asfixia directa cuando tiene la nariz tapada. De lo contrario, cuando la obstrucción nasal es muy grande y no se trata, puede causar problemas respiratorios, especialmente en bebés menores de 3 meses.
Estos son algunos signos a los que hay que estar atentos:
- Aletas nasales muy abiertas al respirar
- Gemidos o silbidos al respirar
- Disminución de la ingesta
¿La congestión nasal en bebés puede causar el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL)?
No existe una conclusión directa de que una nariz tapada provoque el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL). Sin embargo, las infecciones de las vías respiratorias superiores o la obstrucción de las mismas, que son factores de riesgo del SMSL, pueden coincidir con la congestión.
Además, el riesgo de SMSL se incrementa por prácticas inseguras durante el sueño (como colocar almohadas o inclinar la cuna intentando ayudar al bebé) cuando existe congestión.
Se recomienda no compartir la cama con el bebé, sino mantener su lugar de descanso dentro de tu habitación durante los primeros 6-12 meses. Una madre comenta: "Cuando mi bebé está congestionado y no puede dormir, prefiero poner su cuna junto a mi cama, así puedo vigilarlo mejor".
¿Cuándo debo preocuparme por la congestión nasal de mi bebé?
Consulta con tu pediatra o acude a un servicio de urgencias si tu bebé presenta alguno de los siguientes síntomas:
- Dificultad para respirar (respiración rápida, gemidos, aleteo de las fosas nasales)
- Problemas al alimentarse (no se engancha al pecho o biberón, se niega a comer por la nariz tapada)
- En bebés menores de 3 meses: fiebre superior a 38 °C (100.4 °F)
- Signos de deshidratación (boca seca, ausencia de lágrimas, disminución del número de pañales mojados)
- Congestión prolongada que dura más de 10 días
- Tirones de orejas, irritabilidad o secreción verde o amarilla que indique infección
No tengas miedo de seguir tu instinto y, si no estás segura, no dudes en consultar a un profesional.
Conclusión
¿Pueden los bebés fallecer a causa de una nariz tapada? Aunque los casos son raros, la congestión nasal en bebés puede generar complicaciones graves, especialmente si se combina con condiciones de sueño inseguras o enfermedad. Toma decisiones informadas y, ante la duda, consulta al pediatra de tu hijo. Esta es la mejor manera de estar preparada y actuar proactivamente.