¿Cómo calentar la leche materna que estuvo en el refrigerador?

How Do I Warm Breast Milk From the Fridge?

Si eres una madre primeriza que refrigera la leche, es esencial que sepas muy bien cómo calentar la leche materna que estuvo en el refrigerador. Esto es útil cuando regresas del trabajo y tienes que dividir los horarios de las tomas en la noche o cuando es imposible dar de lactar directamente del pecho. Por ello, este blog te mostrará formas sencillas de calentar la leche refrigerada sin perder todos sus buenos nutrientes.

Cuatro métodos para calentar la leche materna que estuvo en el refrigerador

Calentar la leche materna no tiene que ser difícil. Aquí te mostraremos cuatro formas comprobadas para asegurarte de que la leche para tu bebé alcance la temperatura adecuada. Asimismo, cada método tiene diferentes beneficios, por lo que puedes pensar en usar el que más se adecúe a tu rutina.

Método 1: Usa un calientabiberones

Un calientabiberones puede ser un dispositivo práctico para los padres ocupados, ya que podría ofrecer un proceso de calentamiento rápido y consistente. Por ejemplo, el calientabiberones Momcozy simplifica este proceso con los siguientes pasos sencillos:

  • Llena el calentador con agua hasta el nivel indicado.
  • Coloca el biberón con leche fría en el calentador.
  • Selecciona el modo adecuado para la leche.
  • Espera que el calentador termine su ciclo, que normalmente toma entre 3-5 minutos.
  • con leche
  • Agita suavemente el biberón para mezclar la leche.
  • Prueba la temperatura en tu muñeca antes de dar de lactar.
The process of using a milk warmer to heat breast milk for feeding babies

Método 2: Usa agua tibia del caño

Este método es sencillo y no requiere ningún equipo especializado:

  • Sostén el biberón con leche y cerrado debajo del caño de agua tibia.
  • Rota el biberón para que se caliente con uniformidad.
  • Continúa durante 1-2 minutos o hasta que la leche alcance la temperatura corporal.
  • Seca el exterior del biberón con una toalla limpia.
  • Agita suavemente la leche para mezclar cualquier grasa separada.
  • Revisa la temperatura en tu muñeca antes de dar de lactar.

Método 3: Baño de agua templada

Esta técnica es menos agresiva y ayuda a mantener la calidad nutricional de la leche:

  • Llena un recipiente con agua templada (no caliente).
  • Sumerge el biberón con leche y cerrado en el agua.
  • Déjalo de 5 a 10 minutos, dependiendo de la temperatura inicial de la leche.
  • Agita de vez en cuando la leche en el biberón.
  • Saca el biberón y sécalo con una toalla limpia.
  • Prueba la temperatura antes de ofrecérselo a tu bebé.

Método 4: Método a temperatura ambiente

Esta técnica de calentamiento progresivo requiere cierta planificación, pero es muy suave:

  • Saca el biberón con leche del refrigerador.
  • Colócalo en una superficie limpia y a temperatura ambiente.
  • Déjalo reposar durante 30-60 minutos, dependiendo de la temperatura ambiente y la cantidad de leche.
  • Agita suavemente la leche para redistribuir cualquier grasa separada.
  • Revisa que la leche no esté demasiado caliente antes de dar de lactar.

Cada uno de estos métodos tiene sus ventajas. El calientabiberones es rápido y consistente, el agua tibia del caño es simple y accesible, el baño de agua templada es menos agresivo y eficaz, y el calentamiento a temperatura ambiente es el método que no requiere de ninguna intervención. Por lo tanto, usa el método que mejor se adapte a tu situación, pero, por supuesto, nunca sobrecalientes la leche durante el proceso para conservar sus valiosos nutrientes.

Cómo calentar la leche que estuvo en el refrigerador

Calentar leche congelada es un poco más complicado que calentar leche refrigerada. Básicamente, consiste en un proceso de dos pasos: descongelar y calentar.

Paso 1: Descongela la leche

El mejor método para descongelarla es pasándola al refrigerador. Este es un método poco agresivo para descongelarla, y no dañarás su valor nutricional. La descongelación lenta impide la proliferación de bacterias y, al mismo tiempo, sirve como prevención.

Para descongelar en el refrigerador:

  • Mueve el recipiente con leche congelada a la parte principal del refrigerador.
  • Déjalo por 12-24 horas para que se descongele por completo.
  • Usa la leche descongelada dentro de un plazo de 24 horas.
  • Usa un calientabiberones que tenga una función para descongelar. Algunos de ellos, como el calientabiberones analógico e inteligente Momcozy Nutri, permiten descongelar directamente la leche usando un modo específico para ello.
Momcozy's Nutri Smart Analog Baby Bottle Warmer

Si necesitas calentar la leche más rápido:

  • Mantén el recipiente con leche congelada debajo del caño con agua fría.
  • Aumenta poco a poco la temperatura del agua a tibia (no caliente).
  • Agita suavemente el recipiente para mezclar la leche mientras se descongela.

Nunca uses agua caliente para descongelar rápido, ya que puede dañar sus nutrientes y crear zonas calientes.

Paso 2: Calienta la leche descongelada

Cuando se haya descongelado, caliéntala usando uno de estos métodos:

  • Calientabiberones: Coloca el biberón en el calentador y sigue las instrucciones del dispositivo.
  • Agua tibia del caño: Mantén el biberón debajo del caño con agua tibia, ve rotándolo para que calientes la leche de forma uniforme.
  • Agua tibia: Coloca el biberón en un recipiente con agua tibia durante 5-10 minutos.
  • Método a temperatura ambiente: Deja que la leche repose a temperatura ambiente por 30-60 minutos.

Nunca vuelvas a congelar la leche descongelada. De igual forma, evita usar un microondas porque puede crear zonas calientes peligrosas y destruir sus nutrientes. Siempre revisa la temperatura antes de dar de lactar a tu bebé.

Los siguientes pasos ayudarán a tu bebé a recibir todos los beneficios de la leche cuidadosamente almacenada. Es hora de dejar que tu bebé disfrute de una alimentación nutritiva con leche congelada hace poco o meses.

Hold the bottle under warm running tap water

¿Se tiene que calentar la leche que estuvo en el refrigerador?

No, no es necesario. Al contrario de lo que se suele pensar, no existe ninguna regla fija sobre el calentamiento de la leche refrigerada. Muchos padres de familia se sorprenden al darse cuenta de que la leche fría o a temperatura ambiente se puede tomar sin problemas.

Preferencias en cuanto a la temperatura

A otros bebés simplemente no les importa tomar leche fría directamente del refrigerador, mientras que otros pueden rechazarlo y preferir que esté a temperatura tibia. Esto normalmente se debe a la familiaridad de la leche materna recién extraída, que se produce de forma natural a la temperatura corporal.

Beneficios de calentar la leche materna

Hay situaciones donde calentarla puede ser favorable:

  • Comodidad: El calor familiar puede ser reconfortante para un bebé que aún se está acostumbrando al biberón.
  • Distribución de la grasa: El calentamiento puede mezclar la grasa que se separa cuando se almacena la leche y ayudar a que tu bebé reciba una mezcla uniforme de nutrientes.
  • Mejor digestión: Calentar la leche puede facilitar la digestión de algunos bebés, reduciendo potencialmente problemas como los gases o el reflujo.
  • Consistencia en la temperatura: Calentar la leche a temperatura corporal (alrededor de 98.6°F o 37°C) puede proporcionar una experiencia de toma constante, imitando la lactancia materna directa.
  • Mayor aceptación: Algunos bebés pueden estar más dispuestos a tomar el biberón si la leche está tibia, sobre todo si están pasando de la lactancia materna.
  • Mejor absorción de nutrientes: Algunos estudios sugieren que la leche tibia facilita la absorción de ciertos nutrientes.

Es importante tener en cuenta que la mayoría de los bebés prefieren la leche materna a temperatura corporal, que es aproximadamente a 98.6°F (37°C). Sin embargo, cualquier temperatura entre 92°F y 100°F (entre 33°C y 38°C) se considera generalmente aceptable.

La decisión de calentarla o servirla fría dependerá de las preferencias de tu bebé y la rutina de tu familia. Prueba diferentes temperaturas de leche y observa las reacciones de tu bebé para determinar sus preferencias. Cuanto más regular seas con las sesiones de lactancia, más fácil será establecer una rutina cómoda para ti y tu bebé.

A hand holds a bottle of milk on a white device in front of a lake and trees

¿Puedo calentar la leche materna en un microondas?

No, nunca debes calentarla en el microondas. Esto es muy peligroso y puede afectar la salud de tu bebé y la calidad de la leche.

Usar un microondas puede crear zonas calientes en la leche que pueden quemar la boca de tu bebé, aunque el biberón esté frío al tacto. Además, los microondas la calientan demasiado y pueden destruir sus nutrientes y anticuerpos valiosos, reduciendo su valor nutricional para tu bebé. Asimismo, calentar con microondas altera la estructura molecular de sus proteínas, lo que afecta negativamente la digestión de tu bebé.

¿Puedo calentar la leche materna en la cocina?

Aunque sea posible calentarla usando un método de baño de agua en la cocina, hay que tomar algunas precauciones. Puedes calentarla colocando el biberón o la bolsa en una olla con agua tibia, pero nunca coloques el recipiente o la bolsa con leche directamente a la olla ni la calientes en la cocina.

Con este método debes tener muchísimo cuidado para no calentar demasiado la leche, ya que esto podría destruir sus nutrientes y anticuerpos. Calentar directamente en la cocina causa que la temperatura aumente muy rápido y de forma desigual, creando zonas calientes que pueden quemar la boca de tu bebé. También hace que alcanzar la temperatura adecuada sea difícil.

Para un calentamiento más seguro, se recomiendan los baños de agua tibia o los calientabiberones que no estén directamente sobre fuentes de calor. Estos métodos proporcionan un calentamiento más controlado y uniforme, lo cual es importante para conservar el contenido nutricional de la leche y la seguridad de tu bebé.

¿Puedo volver a refrigerar la leche caliente?

No, no se recomienda volver a refrigerarla. Deja enfriar la leche unos 30 minutos a temperatura ambiente. Esto detendrá el crecimiento de bacterias en ella y garantizaría una buena calidad.

Después de que se enfríe, pásala a un recipiente limpio y cubierto, y almacénala en la parte trasera del refrigerador, donde está más fría. Por último, ponle una etiqueta con la fecha. La leche almacenada correctamente se conserva bien en el refrigerador hasta por 4 días a 40°F o menos.

¿Cuánto dura la leche calentada en el refrigerador?

La leche descongelada y refrigerada se debe tomar en un plazo de 2 horas. Si todavía sobra después de este límite, hay que desecharla por motivos de seguridad para la salud del bebé.

Si tu bebé no ha terminado de lactar, la leche restante en el biberón se debe usar en un plazo de una hora. Lo que significa que no puedes volver a refrigerarla porque durante la toma podrían haber entrado bacterias de la boca de tu bebé a la leche.

Siempre revisa la temperatura de la leche calentada antes de dar de lactar. Solo calienta la cantidad que creas que tu bebé tomará para que no desperdicies nada.

Calienta la leche de forma segura para tu bebé

Calentar adecuadamente la leche mantiene seguro a tu bebé y conserva su nivel nutritivo. Algunos de los mejores métodos son los calientabiberones y un baño de agua tibia, mientras que otros que deben evitarse totalmente son los microondas y las cocinas. Recuerda que después de que la leche se enfríe, puedes refrigerarla. Asimismo, usa la leche calentada en un plazo de dos horas y presta atención a la temperatura que tu bebé prefiera. Estos fueron algunos pasos sencillos para alimentar a tu bebé de forma segura y nutritiva.

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